Aragon en Suiza

Este verano he tenido la posibilidad de jorearme por tierras suizas. Me he quedado prendado de este país, donde he podido disfrutar de unos paisajes maravillosos. Buena parte del territorio está salpicado por los Alpes, una coordillera mucho más potente que nuestros Pirineos, pero con muchas similitudes en cuanto a vegetación y orografía. Sin embargo aquí todo es más grande. El mayor glaciar de Europa con 24 kilómetros de longitud entre otros muchos. Cascadas encadenadas con trescientros metros de desnivel, otras que discurren por oquedades que producen un ruido atronador. Ríos de color grisáceo, procedentes del deshielo permanente durante todo el verano, como si se tratase de un mayenco* constante. Y por supuesto montañas altivas y verdes valles verdes salpicados de las tradicionales casas de madera llenas de flores.

*Mayenco: crecida de un río por deshielo.

cartel_aragonsuiza plano_aragonsuiza

Durante mi estancia me llamó la atención en un mapa la presencia de un núcleo llamado Aragon. Me pudo la curiosidad y me acerqué a esta urbanización turística que llevaba este nombre, aunque más me hubiera gustado encontrar un pueblo con más historia. Sin embargo no dejaba de ser curioso que un lugar tuviese el nombre de Aragón en Suiza, y situado a nada menos que 1.300 kilómetros de distancia. Desconozco a qué se debe la denominación de esta urbanización. Se trata de un conjunto de apartamentos turísticos construidos no hace muchos años. Está compuesto por unas cuarenta casas típicas de montaña recubiertas de madera, rodeadas de espacios peatonales.

casas1_aragonsuiza casas2_aragonsuiza

Su ubicación no puede ser más bucólica, a menos de un kilómetro del pequeño pueblo de Ernen perteneciente al cantón de Valais, al sur de Suiza. En una suave ladera donde abundan los pastos salpicados de vacas, y en cuyo fondo discurre el Ródano, unos de los ríos más importantes de Europa. A unos cincuenta kilómetros está su nacimiento, en el glaciar del Ródano. Es bien conocido por los turistas ya que todos los años se talla dentro de él una galería de unos cien metros de longitud que permite introducirse en el hielo, y que ofrece una visión espectacular del interior del glaciar con paredes de color azulado y brillante.

vistas_aragonsuiza

No merece la pena ir de propio* a Aragon en Suiza, pero sí visitar su entorno. Un lugar privilegiado en medio de los Alpes donde poder deleitarse con un paisaje y una arquitectura de la que bien pueden presumir los suizos.

*De propio: Ex profeso.