En las últimas fechas el cineasta turolense Segundo de Chomón está de actualidad. Como suele ser habitual, este artista aragonés de renombre internacional, es apenas conocido entre los aragoneses. En su novena edición la Muestra Audiovisual Aragonesa ProyectaAragón le rinde homenaje con el pre-estreno del largometraje documental El hombre que quiso ser Segundo, del director Ramón Alós, y coproducido por Gaizka Urresti Producciones y Aragón Televisión. En él se trata la peculiar relación que tuvo con su hermano bezón*, Primo de Chomón. Y se relata la vida y obra del cineasta pionero del cine mudo y de la técnica de la animación cinematográfica.
*Bezón: Gemelo.
Director, técnico de iluminación y de fotografía, especialista en trucajes y revelado, precursor del cine fantástico y de animación. Segundo de Chomón se considera uno de los pioneros de la historia del cine, equiparable a los hermanos Lumière, George Méliès y Charles Pathé. Se trata de uno de los más importantes cineastas internacionales por su contribución al desarrollo del arte cinematográfico en la etapa muda, que trabajó para los más importantes directores y productores de aquella época en Francia, Italia y España.
Muchos fueron los logros conseguidos a lo largo de su carrera. A él se le atribuye el desarrollo el paso de manivela, conocida actualmente como stop-motion. Se trata de una técnica de animación consistente en la toma sucesiva de imágenes fijas que una vez proyectadas dan sensación de movimiento. Ello permite ver en la pantalla objetos moverse por sí solos. Pero también se dice que inventó el travelling, que consiste en el rodaje de una escena situándose la cámara y su operador sobre un elemento en movimiento. También trabajó en un sistema de cine en color por bicromía alterna, por el que fue premiado con la medalla de oro de la Exposición Internacional de Fotografía, Óptica y Cinematografía de Turín. Pero sin duda alguna fue un genio en los trucajes, dominó la utilización de maquetas, invirtiendo hasta meses para conseguir los efectos deseados, aunque duraran en pantalla un inte*.
*Inte: Momento, instante.
Segundo de Chomón nació en Teruel el 17 de octubre de 1871. Cursó estudios de ingeniería, y en 1895 se traslada a París descubriendo el cinematógrafo Lumière. Allí conoció a la actriz Julienne Mathieu, con la cual se casó. Dejó la capital francesa entre 1897 y 1898 para cumplir el servicio militar en Cuba. A su vuelta comienza a trabajar en un taller de coloreado a mano de películas fotograma a fotograma fundado por Georges Méliès. El cine en color se convirtió en una de sus pasiones, desarrollando un sistema de coloreado que con algunas modificaciones fue patentado posteriormente por Charles Pathé con la denominación Pathécolor. En 1902 se traslada a Barcelona y pone en marcha un taller que comercializa su sistema de coloreado, realizando la película El hada de primavera (1902). Se asocia con Macaya y Carro fundando la primera productora de cine española. En España fue el creador del género zarzuelístico en el cine. En esta época ensaya trucajes y efectos con el resultado de Choque de trenes (1902), y perfecciona la técnica del paso de manivela en Eclipse de sol (1905), entre otras muchas obras.
A su finalización vuelve a París siendo contratado por la Pathé Frères, la productora más importante de la época. Durante esta etapa realizó más de 100 cortometrajes. Chomón trabajó incansablemente en nuevos descubrimientos técnicos y efectos especiales que luego aplicaba a sus películas fantásticas, en clara competición con Georges Méliès. Crea filmes fantasmagóricos con títulos como El castillo encantado (1908). Pero también otros más alegres y coloristas llevando a cabo los efectos especiales de La gallina de los huevos de oro (1905). Pero su obra más importante es el El hotel eléctrico (1908) que supone la cumbre del procedimiento del paso de manivela.
En 1910 regresa a Barcelona rodando 37 películas de asunto popular, de diferentes estilos: cómicas, melodramáticas y fantásticas. También adapta sainetes y zarzuelas, contribuyendo a sentar las bases de un cierto cine español de alcance popular. En 1912 se traslada a Italia para trabajar en la productora Itala Film. Es contratado como operador y técnico en efectos especiales, siendo el director de su propio equipo técnico dedicado al trabajo de fotografía, iluminación y trucajes de las producciones de los directores de la compañía. En 1914 participa una de las mayores superproducciones del cine mudo italiano, Cabiria (1914), filme de tres horas ambientado a finales del siglo III a.C. Sobresale su trabajo de realización y filmación de maquetas, efectos especiales y de iluminación así como tareas de revelado y positivado. Filmó también en Marruecos y Túnez. Su último trabajo fue la colaboración técnica en el Napoleón de Abel Gance. Murió en París el 2 de mayo de 1929.